viernes, 9 de marzo de 2012

2o día

Segundo día de dieta.

- A primera hora de la mañana: además de las vitaminas y complementos que me tocan (que ayer no comenté nada al respecto), hoy he probado el "Capuccino". Y... umm... no estaba mal (que, repito, no es lo mismo que decir que era bueno). Ha salido un poco grumoso, y los grumos me daban asco. Así que he optado por colarlo y, entonces sí, sabía bastante bien.

Al ser la primera semana, la chica de la tienda me recomendó que cogiera "surtidos", y es lo que hice. Esta semana iré probando, y la semana que viene ya compraré sólo lo que más me guste. De todas formas, es más bueno el "café con leche" de ayer que el "Capuccino" de hoy.

- Desayuno: pues lo mismo que ayer el pseudo "bizcocho" y un té. Hoy, rojo.

- Comida: tengo que currármelo más, pero hasta mañana no podré ir a hacer la compra, así que he tenido que arreglarme con lo que quedaba por casa, que era más bien poco. Así que, otra vez, ensalada verde verdísima, pero esta vez de escarola. El aliño debe mejorar. Vaya, tiene que mejorar, por fuerza. Y el producto proteico: crema de pollo. Y estaba buena, realmente buena!

- Media tarde: mi barrita de yogur de manzana. Hoy me ha parecido bastante mejor que ayer, por cierto. No me gusta la textura, pero ya no me parece "mala de cojones".

- Cena: igual que ayer, lo peor del día. Ensalada, con el aliño mejorado. Bien. Pero no acabo de acertar con el producto proteico. Hoy he probado con la "tortilla de champiñones". Para empezar, más que tortilla, me ha salido un revuelto, porque se me ha pegado toda en la paella. Olía bien y ha empezado gustándome. Pero a medida que la comía iba cerrándoseme el estómago y empezaba a darme asco. He acabado por dejar de comérmela, y ha venido en mi ayuda alguien que tiene el estómago a prueba de bombas...



En resumen... El día lo he pasado más o menos bien. Tengo hambre a ratos. O no acaba de ser hambre, porque al final esa dieta lo que hace es engañar completamente al cuerpo. Pero no es una sensación normal. Hoy no he tenido la boca tan pastosa, y tampoco dolor de cabeza. No quiero obsesionarme con la cetosis -que el médico me dijo que no me obsesionara-, pero estoy por comprarme las tiras reactivas. Continuamente me asalta la duda "estaré en cetosis?". Es curiosidad, no obsesión. Con lo poco que estoy comiendo tengo que estar perdiendo peso seguro, pero quiero sentir en mis propias carnes (sí, es recochineo) la sensación de euforia y ganas de hacer cosas que dice la gente en los foros que tienen cuando están en cetosis. Porque yo, de momento, sólo tengo ganas de estar tirada en el sofá sin hacer nada en especial y de dormir.



No hay comentarios:

Publicar un comentario