Aquello de "cuando haces pop no hay stop", es totalmente cierto en mi caso.
Llevos unos días de muy malcomer y de saltarme la dieta. No me la salto muy a lo bestia, eso no, pero estoy cometiendo pequeñas (y no tan pequeñas) transgresiones prácticamente a diario. Y más de una al día, también.
Estoy en "aquellos días", o más bien, "aquello días previos a"... y estoy en un sinvivir de ansias. Vaya, que estoy ansiosa perdida. Y me está costando mucho no descontrolar del todo.
Este fin de semana ha caído una comida "libre" (que sí, que en esa dieta no se puede), y un par de helados. Y entre semana también cayó una cena "libre". Al final las comidas "libres" no son muy escandalosas (berenjena laminada no es una súper transgresión, y chipirones tampoco. Las formas de cocción sí, pero podría ser peor), pero tengo la sensación de estar un poco descontrolada. Y estoy pensando todo el santo día en comida.
Y así no se puede.
Hoy me he propuesto hacer un día perfecto, y lo voy a cumplir. En general, entre semana no me cuesta portarme bien. Es más complicado los fines de semana, especialmente en "aquellos días".
Evidentemente, voy dando vueltas al mismo peso, no subo, pero tampoco bajo.
Y estoy harta de esta dieta. La mandaría al carajo, pero no quiero hacerlo hasta que me hayan introducido todos los alimentos. Si paro ahora, el efecto rebote será inmediato, y es lo que quiero evitar.
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